martes, 17 de septiembre de 2013

ESTO NO VA BIEN (2)



DEBIDO A MUCHAS ACCIONES DEL HOMBRE, EL PLANETA SE VA DETERIORANDO Y CADA VEZ LLEGA A LA ATMÓSFERA NIVELES DE DIÓXIDO DE CARBONO MÁS PREOCUPANTES. 


Os voy a contar una cosa, si la Canciller alemana vuelve a ser reelegida en Alemania, vetará la reducción que tenía prevista aprobar la Unión Europea de emisiones de CO2 de los vehículos a motor. ¿Y por qué? Pues está bien claro, la industria automovilística alemana tiene mucha mano en el gobierno dado que se erige como uno de los motores (nunca mejor dicho) del país teutón. 

Ese interés económico puede implicar que nuestro aire y el aire que respirarán nuestros hijos de aquí a un tiempo, sea peor de lo que ya lo es ahora, y peor de lo que podría haber sido si esta medida se hubiera aprobado. 

Como todo sigue moviéndose al amparo de los ricos, y muchos gobiernos están atados de pies y manos, seremos testigos de algunas de las barbaridades más grandes a nivel ecológico en las próximas décadas. Eso sí, tenemos una posibilidad de hacer que esto cambie votando a partidos políticos más "verdes" y con cierto respeto por la vida terrestre. Lo que está claro es que los que hay gobernando no lo tienen.

Pues a colación de esto hoy os quería traer un proyecto de un arquitecto franco-belga que ha planteado lo que podríamos decir una "ciudad flotante". ¿Y esto porqué?

Pues se teme que durante el transcurso del siglo XXI el nivel de los mares suba entre 40 y 90 cm, debido al calentamiento global y por lo tanto, muchos habitantes del planeta se queden sin hogar. Estamos hablando de Holanda, Egipto, New York, Londres, Tokyo, Miami, Bahamas, Shanghai, Lagos, Bombay, Bangladesh, y muchos atolones en Oceanía como el de Kiribati, etc.

Aunque estas ciudades flotantes son capaces de albergar hasta 50.000 personas, si todas estas ciudades de las que os hablo se inundaran estaríamos hablando de millones de personas refugiadas climáticas. Un desastre vamos.

No voy a comentaros nada sobre la calidad del proyecto, pero ya os podéis imaginar que si alguien está pensando en crear o construir algo así, es porque el río suena, y si suena es que agua lleva.

Así que pensadlo bien, quizá nosotros no lo veamos, pero nuestros hijos y nietos sí, y seguro que no les gusta el mundo que les hemos dejado comparado con el que pudimos legarles.

ESTO NO VA BIEN (1)


El séptimo continente es una bolsa de basura gigante.

No nos damos cuenta, pero cada vez salen a la luz más informes acerca de la contaminación de los parques naturales, la destrucción de ecosistemas vitales para la subsistencia de todos los habitantes de la Tierra, arrecifes coralinos que se van perdiendo, fugas de radio actividad, contaminación incontrolada de ríos, incendios, disminución de la capa de ozono (la que nos ofrece protección ante los rayos UVA), extinción de especies...
Y da la impresión que no interesa a nadie. Como no devolvería beneficio económico alguno, pues nadie hace nada. Eso es lo triste.

No os lo vais a creer pero hace tiempo que se sabe que existe una "isla" de basura en medio del océano Pacífico. Entre USA, Hawaii, Alaska y Japón. Para que os hagáis una idea mirad la foto del "séptimo continente" (geológicamente hablando).

Las corriente marinas la van moviendo, pero circularmente, es decir su lugar es siempre el mismo.

Pues bien, esta isla tiene el tamaño del estado de Texas y está formada por 3.5 billones de toneladas de basura de la cual el 80% es plástico. ¿Y en qué nos afecta? Pues si la concentración de mercurio en la zona es muy elevada y los peces que nos comemos vienen de por allí, podrían darse malformaciones en el feto, por ejemplo. 

Hay una degradación de los plásticos por la acción solar que deja una "sopa" superficial.
Esa convergencia oceánica hace que esa "sopa" flotante lleve ahí un montón de tiempo debido a que las corrientes fuertes pasan más cerca de la costa de Estados Unidos. Pero, ¿porqué no la quitamos? Pues por lo que os he dicho antes. Se debería llegar a un acuerdo internacional en Naciones Unidas, pero ellos no se ponen de acuerdo en eso. ¿Sabéis lo que hacen?. Obligan a los supermercados a cobrarnos las bolsas de plástico. Es decir las "autoridades" no dan solución al problema, sino que lo único que hacen es procurar que no se haga más grande. A tapar las vergüenzas como siempre. No vamos bien.

Pero tranquilos, siempre hay alguien que piensa en esas cosas y su capacidad cerebral podría ayudarnos. Por desgracia, "sólo" tenemos eso, su capacidad intelectual para dar una solución pero no el dinero para llevarla a cabo. Dos arquitectos coreanos han pensado en crear una isla flotante. Esta "isla" de basura se convertiría en una mega ciudad flotante, con sus cultivos, granjas de animales y a su vez iría limpiando el océano de basura.

Algunos estaréis pensando en la película de Waterworld de Kevin Costner.

El proyecto habla de módulos con 3 flotadores que sirven de containers para recoger la basura pero también como viviendas. La idea es que los módulos, una vez llenos, se cierren y se enlacen a una isla mayor, dando cada vez una superficie mayor a la ciudad. Incluso sobre ellos se puede echar tierra y hacer plantaciones para abastecer a los habitantes de la ciudad flotante. Los arquitectos comentan que pasar toda la vida en la ciudad sería sostenible, ya que se reciclaría, se plantaría, se cosecharía, se podría purificar el agua y se utilizaría energía cinética, fotovoltaica, maremotriz, etc.

No sé que os parece a primera vista esto, pero a mí me ha dejado perplejo saber que ahí fuera hay todo un montón de basura gigantesco bañándose en aguas de las que sacamos el pescado para comérnoslo y los gobiernos no hacen nada para remediarlo. Tampoco hacen nada los grandes magnates mundiales tras recurrentes apariciones en la lista Forbes presumiendo de billetes. Dan a la beneficencia, es cierto, pero por dos motivos primordiales: fiscalidad y apariencia. Para mí es totalmente insuficiente. ¿Y los políticos? Pues están entretenidos con Gibraltar, los datos macro económicos de los "mercados", tapando casos de corruptelas que aparecen por doquier, y así, repito, no vamos bien.
Continuará...